

Un Sistema Solar Térmico (SST) transforma la energía radiante emitida por el sol en energía térmica y la acumula, en forma de agua caliente, para pasar al sistema auxiliar (comúnmente calefón) antes de su posterior consumo.
El sol es una fuente energética renovable, limpia y confiable, que permite sustituir parte del consumo de combustibles fósiles y/o electricidad, generando ahorros y aportando al cuidado del medio ambiente.


Beneficios
1.- Ahorro de energía térmica: bajará el gasto en agua caliente de tu hogar
- El ahorro de energía dependerá de la ubicación del Sistema Solar Térmico (SST) y va entre un 30% a un 75% o más.
- El resto de la demanda puede ser proporcionada por sistemas convencionales de producción de agua caliente.
- En Santiago una vivienda de cuatro personas, con un Sistema Solar Térmico podría alcanzar un ahorro aproximado de $140.000 anuales.
2.- La inversión se amortiza con el ahorro energético
- Un sistema solar térmico recupera la inversión entre 8 y 12 años, con una vida útil de 15 a 20 años en promedio.
- El período de amortización efectivo dependerá del tipo de combustible que se sustituye, la variación de su precio, la radiación solar existente, la demanda de agua caliente y el tamaño y costo del SST.
3.- Es una solución para las familias que no cuentan con agua caliente
- Una gran cantidad de las familias en Chile no tiene los medios para calentar agua y un Sistema Solar Térmico mejora significativamente la calidad de vida de ellas.
La energía térmica que se produce a partir de un SST se puede utilizar de diversas maneras, siendo el uso más común la generación de agua caliente sanitaria en forma directa.
Pero también la energía térmica se puede utilizar en sistemas combinados de agua caliente y calefacción de recintos, calentamiento de piscinas, así como sistemas de calefacción distrital de gran escala y aplicaciones industriales, pudiendo disminuir el consumo de combustibles fósiles o de electricidad.